sábado, 8 de enero de 2011

EL ÁRBOL DE LOS DESEOS

El otro día, mientras me columpiaba , vi a una mujer sentada en la orilla de un enorme río. Me bajé del columpio y me acerqué a ella lentamente. Ella me miró con sus enormes ojos color café pero no dijo nada. Su rostro era triste, pero sin embargo sonreía.Al principio pensé en volver al columpio pero me sente junto a ella. Estaba observando un árbol que estaba al otro lado de el rio. - Es el árbol de la vida- me dijo. Su voz era suave pero profunda.- Cuenta una leyenda que si pides un deseo debajo de sus hojas, el deseo se hace realidad, pero el deseo solo solo puede ser sobre tu vida no sobre la de los demás-. Yo estaba fascinada.
- ¿Y tu has pedido algún deseo?- le pregunté.
- A mi no me hace falta, mi vida es maravillosa tal y como es- me respondió.
Eso ya si que no me lo podía creer.
-Pero tiene que haber algo que necesites- le dije.
- Lo hay- me dijo - pero no lo necesito para vivir. Cuando era pequeña mi abuelo siempre me decía que nada es imprescindible y me daba consejos sobre la vida.
- ¿Qué consejos?
ESTOS CONSEJOS: